Ventajas:La decoración y la ubicación son excelentes. Espacios minimalistas y bien cuidados. La habitación es muy bonita.
Desventajas:La atención principalmente. Hicimos una reserva que incluía botella de cava y bombones (pagados en la reserva). Al llegar solo había bombones y tuvimos que llamar para pedir la botella de cava, que tardó más de una hora. Cuando llegó ya no la queríamos porque ya íbamos a dormir. Durante la noche, sobre las 4 de la mañana, nos despertamos y escuchábamos perfectamente música que no provenía de la calle (era un concierto de piano). Llamé a recepción y la única solución que se le ocurrió ofrecerme es pasearse por los pasillos a ver si encontraba de donde venía y llamarles la atención. Al rato, como no obtenía respuesta ni soluciones, tuve que volver a llamar a recepción a ver qué pasaba con ese asunto, pues era imposible dormir. Tuve que sugerirle yo que nos cambiase de recepción (hablamos de un hotel de 4* en pleno centro de Madrid). Al día siguiente al hacer el check-out sólo se limitaron a pedirnos disculpas por el ruido. A pesar de decirles lo de la botella de cava (insisto, pagada como un extra en la reserva. No era cortesía del hotel) sólo hicieron gesto de desaprobación. No sugirieron la devolución del dinero ni nada por el estilo. A pesar de que se olvidaron de llevarnos la botella a la habitación a su hora y a pesar de las molestias de tener que cambiar de habitación (que yo sugerí para poder dormir). Hablamos de recoger las cosas, vestirse, etc. Concluyendo, el hotel como instalación es precioso. Una pena que esté a cargo de gente que NO sabe atenderlo como debe ser atendido un hotel de esas características.