Sunworld Dynasty Hotel Beijing Wangfujing

“El Hotel está ubicado en el centro de Pekin. Está muy cerca la Ciudad Prohibida, andando a 15 minutos. Se encuentra ubicado en la mejor calle comercial de Pekin, que te da acceso a los grandes almacenes APM. Allí tienes las tres plantas más altas llenas de restaurantes. Maravillosos restaurantes que te facilitan poder comer cuando llegas a Pekin por primera vez y no conoces nada. La limpieza magnífica tanto en el hotel como en los restaurantes. No dudéis. Tenía mis recelos, pero me he quedado sorprendido gratamente de Pekín, están super avanzados. El problema es saber entenderte. Consejo: Indicar en el hotel las direcciones que vais a visitar y que os las escriban en chino para enseñarlas cuando te despistes o quieras coger un taxi. Por cierto los taxis son baratos y eficientes, y prefiero coger un taxi por 8€ que tener que ir en el metro lleno de gente y haciendo transbordos. La Ciudad Prohibida y El Palacio de Verano son imprescindibles. Coger audioguía en español e ir por libre. La Gran Muralla la visitamos apuntándonos a una excursión reservada por internet antes de salir de España que nos costó 10€ ida y vuelta en autobús. Unicamente coger el traslado, nada de comer, sacar entradas, etc, que te cuesta más caro. Después en el autobús la guía te pide el dinero de las entrada y cuando llegas te las saca. Fuimos a la zona de Mutianyu y os aconsejamos subir en Funicular (llegas a la torre 14) recorres la muralla unos 2 o 3 kilometros (es todo bajada) y llegas a la torre 6 y te bajas por el tobogán (dos kilómetros de bajada por el bosque). Divertidísimo y emocionante. Nadie lo hizo de los que íbamos en el autobús, puesto que las entradas eran un poco más caras que subir y bajar en el funicular, pero mereció totalmente la pena, ya que fuimos andando sólos por la Gran Muralla, tirando fotos y disfrutándola.”

“La ubicación excelente”